Comprar una casa sin endeudarse de por vida? Imposible, a precios de ciudad.
Por eso he decidido rehabilitar una casa en un pueblo. Presupuesto: 60.000 euros.
¿Saldrán las cuentas?

Coste real de una vivienda ~ Hipoteca para autoconstrucción
Procedimiento para construir una casa o chalet
Proyecto básico y de ejecución ~ Visado en el Colegio de Arquitectos
Google
>

jueves, 18 de junio de 2009

Cosas que hay que saber para construir una casa (II)

Esta es la segunda parte del artículo "Cosas que hay que saber para construir una casa".

En cuanto al arquitecto y el proyecto de arquitectura...

Ata corto al arquitecto: Trabaja conjuntamente con él y asegúrate de que tratáis de prever los posibles problemas construtivos antes de que aparezcan. Esto hará que el resultado sea más satisfactorio. Me temo que el que elegimos nosotros tenía demasiada tendencia a copiar y pegar. No dedicó mucho tiempo a pensar antes de hacer el proyecto, cuáles eran los problemas y las soluciones. En nuestro caso no hizo ningún aporte al boceto inicial, se limitó a poco más que pasar a limpio un dibujo en una servilleta (y el delineante no era él). Realmente el proyecto es un trámite obligatorio, pero probablemente lo más caro en relación al esfuerzo que conlleva.



Y no, no me digan que la arquitectura es un proceso creativo: Lo será en grandes proyectos, pero en este caso, donde no había mucho que diseñar de por sí, se limitó a mandar a alguien que pasara a limpio un boceto. En cuanto al grueso de los cálculos y del texto que aparece en el proyecto, ya les digo que había mucha tendencia al copiar y pegar... y eso tiene el riesgo de que te pillen, sobre todo cuando no te das cuenta de que en el texto que estás copiando y pegando figura el nombre del pueblo equivocado. (Cosa en la que nadie del Colegio de Arquitectos reparó a la hora de visar el proyecto).

En países como Francia, por ejemplo, el diseño de una casa unifamiliar no requiere de un proyecto firmado por un arquitecto y visado por su colegio profesional, sino que lo puede realizar el propio constructor. Un trámite (y un gasto) de menos.

Por el contrario, a diferencia de otros arquitectos en otros casos de los que he oído hablar, se implicó a fondo en la dirección técnica de la obra, el seguimiento y la resolución de imprevistos. En este aspecto, impecable.

Haciendo un balance global, sin embargo, he de reconocer que le prefiero a él, con los pies bien puestos en la tierra, antes que a uno muy "artista" y "creativo".


En cuanto al proyecto en sí:

¿Qué no haría yo igual si pudiera volver atrás? Pues en este caso concreto, habría sido mejor no tratar de rehabilitar al máximo las estructuras existentes (de las cuales a la hora de la verdad se rescató bastante menos de lo que se pensaba en un principio) y directamente construir desde cero, respetando el estilo constructivo original, pero con mejor calidad (recordemos que este era un edificio rústico, construido de forma artesanal. El concepto de línea recta al parecer era desconocido en aquella época).